Notici@s Jose Lull

¿Qué es lo que merodea en las afueras del Sistema Solar?

28 sep 2001 - Es sólo cuestión de tiempo, dicen los investigadores, antes de que los astrónomos encuentren algo tan grande como Plutón en las frías regiones periféricas del sistema solar.

A miles de millones de kilómetros de la Tierra, más allá de la órbita de Neptuno, se encuentra la que tal vez sea la región más extrema de nuestro sistema solar: una región vasta, tan fría y oscura que es capaz de dar escalofríos a los astronautas mas precavidos. El Sol, tan alegre y cálido, allá sólo es la estrella más brillante en el cielo nocturno. Hace tanto frío en aquellas regiones, que la atmósfera de Plutón - el único planeta de los nueve que orbitan al Sol - yace congelada sobre su superficie la mayor parte del tiempo.

Una nave espacial que se encontrase explorando las regiones periféricas de nuestro sistema solar podría viajar durante un largo tiempo sin ver muchas cosas. De hecho, durante la mayor parte del siglo pasado, los astrónomos pensaron que tampoco había muchas cosas que ver: a lo más el pequeño planeta congelado, Plutón, y su luna con forma de extraña pelota, Caronte. Quizás valía más la pena seguir de largo hacia una estrella lejana.

Arriba: Una visión artística de la parte exterior del sistema solar. Cortesía de Dave Jewitt.

Pero, ¡un momento!. Quizás las regiones lejanas del sistema solar no son tan aburridas después de todo. Ultimamente los astrónomos han encontrado que la frontera más allá de Neptuno, lejos de estar vacía, está plagada de miles de objetos oscuros y misteriosos -- suficientes para hacer que un explorador estelar se detenga por un segundo a hechar un vistazo

Vistos desde la Tierra, estos tenues compañeros de Plutón se asemejan a cometas oscuros. Es difícil saber de que material están compuestos porque sus núcleos están cubiertos por una capa hecha de un pegote orgánico rojizo. Probablemente son una mezcla de hielo, roca y polvo. La mayoría son casi del tamaño de pequeños asteroides (de unos pocos km a unos pocos cientos de km de ancho), y recientemente han sido descubiertos unos pocos que son de un 30 a un 50% del ancho del planeta Plutón (2274 km). De hecho, dicen los astrónomos, podría ser sólo cuestión de tiempo antes de que los observadores encuentren uno tan grande como Plutón.

El primero de estos extraños cuerpos, a los cuales los astrónomos llaman Objetos del Cinturón de Kuiper (en inglés Kuiper Belt Objects ó KBOs), salió a la luz en 1992, descubierto por Dave Jewitt y Jane Luu -- dos científicos que no creían que las regiones externas del sistema solar estuvieran vacías. Comenzando en 1987, observaron obstinadamente los cielos en busca de objetos tenues más allá de Neptuno. Les llevó cinco años, mirando a través del telescopio de 2.2 metros de la Universidad de Hawaii, pero finalmente encontraron lo que estaban buscando: una manchita de color rojizo localizada a 44 UA del Sol --¡todavía más lejos que Plutón! Jewit (Universidad de Hawaii) y Luu (Universidad de California en Berkeley) quisieron llamar a su descibrimiento "Smiley" (Sonriente), pero desde entonces ha estado catalogado como "1992 QB1".

Arriba: Una imagen del descubrimiento de 1992 AB1 (indicado por la flecha) tomada en 1992 por Jewitt y Luu usando el telescopio de 2.2m de la Universidad de Hawaii en Mauna Kea. La raya brillante en esta imagen CCD es un asteroide, cuya velocidad es mayor que la de 1992 QB1 porque se encuentra más cerca del Sol.

Este descubrimiento marcó la primera pista del tan buscado Cinturón de Kuiper, llamado así en honor a Gerard Kuiper quien, en 1941, propuso que un cinturón de cuerpos congelados podria existir más allá de Neptuno. Era la única manera, el pensó, de resolver un misterio desconcertante acerca de los cometas: algunos cometas giran a través del sistema solar siguiendo órbitas periódicas de aproximadamente una media docena de años de duración. Se encuentran cerca del Sol tan frequentemente que se evaporan con rapidez -- desvaneciéndose en sólo unos pocos cientos de miles de años. Los astrónomos los llaman "cometas de período corto", aunque "de vida corta " sería tal vez más correcto. Los cometas de período corto se evaporan tan rápidamente comparados con la edad del sistema solar que no deberíamos ver ninguno, sin embargo los astrónomos encuentran docenas de ellos muy a menudo. Era un verdadero rompecabezas.

Las solución propuesta por Kuiper fué una población de cometas oscuros que dan vueltas alrededor del Sol en las cercanías de Plutón -- conformando los restos de la formación de nuestro Sistema Solar, cuando los planetésimos se fusionaron para dar origen a los planetas. Aquellos más allá de Neptuno, especulaba Kuiper, nunca se unieron, permaneciendo en cambio en su estado original y separados. Ahora viajan hacia el Sol de vez en cuando y se convierten en comentas de período corto.

Los planetésimos -- las unidades estructurales de los planetas -- eran abundantes durante los primeros días de nuestro sistema solar. Todavía merodean invisibles más allá de las órbitas de Neptuno y Plutón. Este dibujo de los orígenes de nuestro sistema solar es cortesía del científico y artista William K. Hartmann (Derechos de Autor 2001, Derechos Resevados).

Ésta fue una solución ingeniosa para el enigma, pero con la discutible excepción de Plutón, nadie pudo encontrar ningún miembro del Cinturón de Kuiper -- esto es, hasta que Jewitt y Luu lo lograron en 1992. Desde entonces los astrónomos han descubierto KBOs a un ritmo vertiginoso. La Unión Astronómica Internacional tiene hoy en día 432 KBOs en su registro. Y esto es sólo la punta del iceberg.

"En base a nuestros mapeos creemos que hay alrededor de 70.000 KBOs con diámetros de más de 100 km localizados a una distancia de entre 30 y 50 AU del Sol", dice Jewitt. Si los juntasemos a todos formarían un planeta de casi un décimo de la masa de la Tierra. El Cinturón de Kuiper es aproximadamente 300 veces más grande que el cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter, agregó.

Aún el encontrar 400 KBOs de entre las decenas de miles presentes más allá de Neptuno es admirable. Estos objetos remotos son sorprendentemente oscuros. A pesar de estar congelados, explica Jewitt, "la mayoría de los KBOs reflejan casi tanta luz solar (4 - 7%) como un trozo de carbón". Esto es resultado del bombardeo de rayos cósmicos, que oscurecen y enrojecen la superficie de los KBOs al causar la ruptura de los enlaces entre las moléculas presentes en el hielo -- de este modo las moléculas llegan a convertirse en complejos compuestos de carbono. El resultado es un pegote orgánico que provee de un buen camuflaje en el espacio oscuro.

Los rayos cósmicos de alta energía ennegrecen el núcleo de un cometa, el cual consiste de una mezcla de hielo (amarillo) y rocas (rojo). La profundidad de penetración de los rayos cósmicos en el hielo podría ser de hasta un metro.La diferencia de edad entre T3 y T0 es aproximadamente cien millones de años.

El planeta Plutón, quizás en sí mismo un KBO, es una excepción. "Plutón tiene un índice de reflexión mayor (60%) que lo que suponemos para otros objetos del Cinturón de Kuiper", agrega Jewitt. "Pero ésto es un artefacto del tamaño. Plutón tiene suficiente masa y gravedad como para retener una tenue atmósfera que posiblemente deposita una escarcha brillante sobre su superficie.

¿Hay acaso más planetas como Plutón aún por descubrir en aquellas regiones? Jewitt piensa que sí. "Desde hace algunos años conocemos la distribución de tamaños de los KBOs", dice. "Es una ley de potencias con índice -4 (N. del T: esto significa que el número de objetos de un cierto tamaño es inversamente proporcional a la raiz cuarta de la masa), lo que sugiere que existen unos pocos objetos del tamaño de Plutón, quizás 5 ó 10, de los cuales, claro está, sólo conocemos uno.

Y ya están apareciendo algunos KBOs relativamente grandes entre los recientemente descubiertos. Por ejemplo, el año pasado Jewitt y colegas encontraron el KBO Varuna orbitando a 43 AU del Sol. Varuna tiene 900 km de ancho y es casi tan grande como el asteroide gigante Ceres (933 km). Después vino 2001 KX76, un descubrimiento del Mapeo Eclípitico Profundo (Deep Ecliptic Survey) patrocinado por la NASA. 2001 KX76 fué una sensación por un tiempo el mes pasado cuando los reportes indicaban que desplazaría a Ceres como el asteroide más grande del sistema solar. Pero resulta ser que 2001 KX76, el cual estácongelado y se encuentra a 39 AU del Sol, no es ni de lejos un asteroide. De cualquier modo, 2001 KX76 es grande, quizás con un diámetro de 1200 o más kilómetros de largo.

Arriba:Los tamaños relativos estimados de Plutón, Caronte, y ocho de los más grandes Objetos del Cinturón de Kuiper (KBOs) descubiertos hasta septiembre del 2001. Sólo los diámetros de Plutón, Caronte, y Varuna han sido exactamente calculados.

En la actualidad, la tecnología para encontrar KBOs, tanto grandes como pequeños, se ha vuelto mucho más poderosa. "Nuestras cámaras CCD son más grandes y mejores, lo que aumenta la capacidad de detección", dice Jewitt, cuyo reciente trabajo es en parte patrocinado por el programa Orígenes (Origins) de la NASA. "Por ejemplo, hemos estado utilizando una cámara que que tiene un área 24 veces mayor que la utilizada para encontrar el primer KBO en 1992. Podemos ahora detectar 24 objetos por el precio de uno".

Quizás pronto una de estas cámaras CCD detecte un objecto que causará una conmoción: el próximo Plutón. "Podría suceder en cualquier momento", dice Jewitt. Después de todo, si hemos aprendido algo en los últimos diez años, es que la periferia del sistema solar no es sólo oscura, remota, y fría,sino que también está llena de sorpresas.

A la búsqueda de vida marciana por vía privada

29 sep 2001 - La cooperación entre dos entidades privadas sin fines de lucro, dedicadas a la exploración espacial, proyecta llevar a cabo una misión a Marte de bajo coste

Un proyecto de colaboración internacional

La cooperación entre dos entidades privadas sin fines de lucro, dedicadas a la exploración espacial, proyecta llevar a cabo una misión a Marte de bajo coste. The Mars Society España (Sociedad de Marte), TMSE(SM), y la organización Espacio Para Todos España (EPT-ES), se han unido para desarrollar el proyecto GANIMA. El objetivo principal de GANIMA será verificar la existencia de agua y vida en el Planeta Rojo. Este proyecto será presentado oficialmente mañana sábado, en el Palais de la Decouverte, en París, durante la primera edición de la convención europea de The Mars Society. GANIMA está siendo desarrollado por personas, vinculadas profesionalmente o no al sector aeroespacial, y entidades de Canadá, Italia, Inglaterra, Argentina, México, Francia y España.

Entre los asesores científicos y técnicos de GANIMA se encuentran Francisco Anguita Virella (Profesor de planetología en la Universidad Complutense), Jordi Llorca Piqué (Universidad de Barcelona - Institut d'Estudis Espacials de Catalunya), Mark Kidger (astrónomo del Instituto de Astrofísica de Canarias) y Jacques Blamont (miembro del CNES).

Presentación en sociedad de GANIMA

El pasado jueves se ultimaron los detalles con Pablo Sarasa, Director Técnico del proyecto GANIMA y ponente en la presentación de GANIMA en la convención que se está celebrando desde hoy, y hasta el próximo domingo, en París.

Pablo ha confirmado la asistencia de TMSE y la OEPT a una reunión de directivos de las filiales de TMS en europa, que se celebrará dentro de dos meses en Rotterdam. Este encuentro durará dos días y se abordarán, entre otros, las propuestas para emplazar el primer habitáculo para Marte en Europa, una estación científica desarrollada para poner a prueba técnicas y protocolos que se utilizarán en las expediciones humanas a Marte, además de servir para realizar investigaciones de campo y de laboratorio de diversos aspectos de la geología, fauna y flora locales. Una de las propuestas es la de instalar este habitáculo en Islandia, aunque su duros inviernos y su situación no la favorecen. Otra alternativa será la que presentará TMSE con la OEPT, en la que propondremos la ubicación de esta estación en el área de Río Tinto, de alto interés para la investigación de las posibilidades de vida autóctona marciana. En esa zona ya está trabajando la NASA a través del Centro de Astrobiología (CAB). Durante las jornadas de trabajo en Rotterdam se presentará nuestra propuesta.

Dentro del calendario de temas a abordar en Rotterdam, también estará la propuesta de creación de un sitio para TMS Europa. En este sitio en Internet harán enlaces a todas las filiales europeas de TMS, y se publicará un boletín mensual de noticias, por medio del cual se difundirán, entre otras cosas, el inicio de nuevos proyectos e informes de los estados de avance de los que estén ya en marcha.

Por otra parte, Pablo hizo entrega a Robert Zubrin de una copia impresa del prólogo y los primeros cinco capítulos de la traducción de The Case For Mars. Zubrin, el autor de ese libro, la referencia bibliográfica del Plan Marte Directo, quedó gratamente impresionado.

Las filiales alemana y británica, así como la española, se han ofrecido como sedes para la celebración de la edición de 2003 de la convención europea de TMS. Fue muy bien acogida la posibilidad de desarrollar la convención en Canarias, por el atractivo turístico asociado. Les informaremos de la decisión que se adopte.

Durante la conversación sostenida entre Zubrin y Pablo, y antes de que el primero fuera "secuestrado" por los periodistas, el Presidente de TMS internacional nos recomendó contactar con el grupo de TMS en Argentina. TMSE intentó algún contacto hace tiempo, y seguimos con ese empeño, convencidos, junto con la OEPT, de que la unión hace la fuerza, evitando malgastar esfuerzos afines.

La representación del equipo alemán que está desarrollando otro proyecto para enviar un aerostato a Marte, en este caso un globo a sobrepresión, contactaron con Pablo y manifestaron su buena disposición para colaborar con la iniciativa GANIMA, confirmando Pablo la misma actitud por parte de TMSE+OEPT.

Les seguiremos informando a medida que vayamos recibiendo más noticias.

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